¿Innovación Tecnológica = Innovación Pedagógica?

El uso de la tecnología en el aula no implica que seamos más innovadores. No debemos confundir el uso de la tecnología como una mera herramienta a ser innovadores por el simple hecho de hacer uso de la tecnología. Tal y como señalan Area y Sanabria (2014) la mera presencia de la tecnología en el aula no provoca innovaciones educativas sustantivas en poco tiempo, ya que éstas requieren una visión a largo plazo para producir cambio en las visiones y prácticas docentes.

No hay duda por tanto, que la dotación en tecnología tanto en España, como en los países de la OCDE como indica Area (2010), ha logrado importantes avances en la reducción de la brecha digital, pero su impacto sobre el cambio educativo y sobre los procesos de aprendizaje son poco visibles y satisfactorios pedagógica y culturalmente. Por tanto se deben replantear las políticas e incidir más en el cambio pedagógico en las escuelas, que en la mera dotación de las TIC.

El docente según Ferreira (2002) se enfrenta ante grandes retos; replantear la educación, es decir, revisar sus prácticas pedagógicas, redefinir sus relaciones con los alumnos en el proceso de enseñanza-aprendizaje, y actualizarse a lo largo de su vida. Según Area (2010) la mayoría de los docentes, aunque existan dispositivos digitales en el aula, siguen enseñando mediante una pedagogía del siglo pasado donde el alumno aprende a través de la repetición de los contenidos que explica el profesor o profesora.

Por tanto innovación tencnológica no significa no se traduce directamente en innovación pedagógica, debido a que en la práctica escolar según Area (2010) las TIC se han utilizado desde una concepción pedagógica tradicional. Es por ello que según Edwyn (2002) todavía no se ha visto claramente las ventajas que existen en la implantación de las TIC en la escuela, como sí se han visto en otros ámbitos; empresas (minoristas, textiles, banca, industria, servicios, etc.).

La escuela tiene que según Ferreira (2002) afrontar grandes desafíos que van desde romper la rigidez de los propios currículos, a desarrollar mentalidades más abiertas y democrácticas, principalmente en la formación del profesorado.

Por ende, Edwyn (2002) concluye que los cambios que provocan la implantación de las TIC en educación, se diferencian de otras reformas en tres aspectos importantes:
Primero, las reformas anteriores del currículum en el ámbito educativo se realizaron a nivel interno, fueron los propios educadores quienes lo hicieron, sin embargo, las TIC se producen a nivel externo, fuera del mundo educativo.

Segundo, es muy frecuente que los alumnos aprecien positivamente los cambios que sus maestros y maestras han desarrollado. Tercero, la naturaleza persuasiva de las TIC tiene profundas implicaciones en el carácter y la organización de todo el entorno educativo, debido a que los nuevos enfoques y formas de trabajar habitualmente no encajan fácilmente con la práctica escolar existente, y no se reflejan en los exámenes de grado con los que se obtienen las certificaciones escolares. 

Es necesario un cambio de paradigma, ya que el modelo tradicional de transmisión de información y repetición de la misma según Area (2010) no tiene validez ni utilidad en el mundo actual. El ciudadano del siglo XXI necesita competencias que debe adquirir mediante una pedagogía del aprender actuando o creando. Esta pedagogía se apoya en los principios de la Escuela Nueva, en la que el docente pasa de ser un mero transmisor del conocimiento a ser un guía en el proceso de enseñanza-aprendizaje donde el alumno es el protagonista quien construye el conocimiento y descubre por si mismo el mismo.

Como conclusión es necesario, para que la innovación tecnológica sea innovación pedagógica que tanto las políticas, como las metodologías y los modelos educativos, esten adaptados a los requerimientos de la sociedad digital, ya que sin dichas adaptaciones es imposible conseguir que las TIC triunfen en el ámbito educativo y que se forme adecuadamente al alumnado para una sociedad digital, y por tanto se cumpla que innovación tecnológica es igual a innovación pedagógica.